El Gran Maestre de la Orden del Temple propone Peñíscola como sede de su Reunión Interna anual

Durante la Conferencia “Pasado, presente y futuro de la Orden del Temple” celebrada el pasado sábado e inscrita en el programa de actividades para la celebración del 700 Aniversario del Castillo de Peñíscola, Don Luís Martos, Cenciller General de España y Gran Maestre de la Orden a nivel mundial anunció su interés por que Peñíscola fuese la sede del Capítulo Interno de la Orden.

Con el motivo de la conferencia, Martos y D. Manuel Pérez Quintanilla, Prior General de la Orden en España, hicieron un recorrido por la creación, expansión, decadencia y extinción de la Orden, analizando con más detenimiento los vínculos que unen el municipio de Peñíscola con la Orden Soberana y Militar del Temple de Jerusalén.

Los 6000 socios de la Orden celebran anualmente un Capítulo o reunión interna donde debaten diversos aspectos relacionados con la gestión interna de la misma. La propuesta de Martos para Peñíscola fue acoger esta reunión anual y organizar una estancia de tres días en la Ciudad del Mar aprovechando los dos restantes para la celebración de conferencias y jornadas sobre la Orden del Temple.

Jordi Pau, director del Castillo de Peñíscola, ha acogido con satisfacción la intención del Gran Maestre de la Orden, augurando un buen entendimiento para la organización del Capítulo Anual: “Martos me ha manifestado la intención de proponer el Castillo de Peñíscola como sede de la reunión anual de la Orden por el marco incomparable de nuestro Castillo y el enclave privilegiado de Peñíscola. Espero que finalmente podamos concretarlo todo y puedan visitar Peñíscola anualmente e instaurar la serie de conferencias año tras año”.

Durante la conferencia celebrada el fin de semana pasado, la participación de los asistentes y su nivel de conocimiento de la Orden del Temple dejó sorprendidos gratamente a los ponentes quienes prepararon un recorrido por casi 1000 años de historia donde los templarios perdurarán mientras la esencia y valores que inspiraron su Orden sigan presentes en las conciencias de los miembros de la actual Orden y los miles de seguidores de la literatura que narra su historia.